Skip to main content
Nacra 17.- Tara Pacheco y Andrés Barrio
VOLVER

Nacra 17

Tara Pacheco (1988 – CN Sur Oeste – Canarias)

Es mi cuarta campaña olímpica. Tras haber participado en Londres 2012 en 470 con Berta Betanzos, comencé a navegar en Nacra en la campaña de Rio 2016, donde formé tándem con Fernando Echávarri, y en Tokio 2020 con Florian Trittel.

¿Cómo está siendo esta campaña olímpica?

He aceptado que no es una campaña ideal, y si hago otra campaña tampoco será ideal. Pero sí que esta es claramente la más complicada que he tenido de las cuatro. Hacer un mejor resultado o igualar el mejor resultado que he tenido, que fue un sexto en Tokio, con lo complicado que ha sido esto, ya sería un buen evento. Obviamente la medalla siempre se quiere buscar, pero es complicado.

¿Pueden ser unos Juegos exitosos sin tener una medalla?

A mí me supo mil veces más la clasificación, que siempre me ha parecido relativamente sencilla, este verano en La Haya, que ganar un Mundial o un Europeo. Sin duda. No es que me haga mayor y me haga sentimental, sino que por lo complicado que ha sido todo, creo que eso es lo que hay que valorar. Lo complejo que se ha puesto todo y, aun así, el equipo ha salido adelante.

¿Un motivo para que esta campaña haya salido mejor que otras anteriores?

Yo soy bastante diferente de una campaña a otra. Creo que aprendido de otras experiencias. Cuando miro atrás la campaña de Tokio, he cambiado cosas que no funcionaron bien. Pero lo que ha marcado la diferencia es la unión que tenemos dentro del equipo, a pesar de los miles de problemas que hay, y muchas veces la frustración que hay, que es muy difícil que los chicos siendo tan jóvenes sean capaces de lidiar con la presión y con situaciones complicadas y conversaciones muy complejas. Eso es algo que sin duda ha marcado la diferencia. Antiguamente era imposible.

¿Es importante llevarse bien con tu compañero de tripulación?

Hacer una campaña entera, te tienes que llevar relativamente bien. Hay muchos momentos muy complicados, en la parte deportiva y en la parte personal, que durante la campaña cambia. Y con esa persona que tienes al lado, llevarse bien es algo bastante importante.

¿Trabajo pendiente hasta los Juegos?

Tenemos un montón de trabajo pendiente para los Juegos. Tenemos que decidir si tocar todos los temas o dejar algunos sin tocar y perfeccionar los que más o menos pensamos que pueden caer, es como un examen. Nos falta tiempo. Me atrevería a decir que el 80% de los equipos estarían encantados si los Juegos fueran mañana. Porque ahora sólo están rellenando el tiempo hasta los Juegos. En cambio, nosotros cada día que podamos raspar horas es bueno para nosotros, aunque nunca lleguemos a arañar todas las horas que quisiéramos. Exprimimos todas las horas, tanto de entrenamiento en el agua como de estar juntos y seguir entrenando sin que sea en el agua, sino creando situaciones en tierra y seguir navegando el barco en nuestra cabeza. Eso puede equivaler a 10 horas en el agua, pero es muy difícil. El nivel de perfeccionamiento que tiene la gente… jugamos con la balanza de que ellos tengan un mal campeonato y nosotros un buen campeonato. La unión que tenemos nosotros es el plus que no tiene el resto de los equipos.

Como no vamos a poder hacer alcanzar las 10.000 horas de trabajo que nos llevan de ventaja, o pensamos algo extraordinario fuera, o no nos va a dar tiempo a rellenar ese espacio. Debemos dar un salto fuera de la caja que nos haga dar un paso más grande, que nos acerque más rápido a ese nivel o que nos haga superar ese nivel. En muchos aspectos ha sido muy bueno, y luego creo que no somos un equipo que se rija por “este equipo va dirigido a esta rama”, sino que gracias a los datos y todas las cosas que tenemos y que somos bastante meticulosos, nos analizamos muy bien a nosotros mismos y luego vemos si lo que ellos hacen nos sirve realmente a nosotros o si tenemos que buscar nuestra ventaja por otro lado. Yo soy de las patronas más chiquitas de la flota ahora mismo, a conciencia, para generar unos avances en ceñida que igual otros no pueden generar con ciertos trimados. Obviamente hay que perfeccionar esos trimados pero es una rama que sé que físcamente otros equipos no pueden tener, y si podemos lograr eso, es un plus que podemos llegar a tener.

¿Ser entrenadora puntualmente te ha ayudado?

Me he dado cuenta de que aún habiendo navegado el barco, hay cosas que son muy difíciles de entender desde fuera, por eso aprecio mucho el trabajo que hace Pablo, de no haberse subido al barco nunca y ser capaz de sentir lo que necesita el barco. Tiene mucho talento. No sé si me ha ayudado, pero me he dado cuenta de que aprecio más el trabajo del entrenador.

¿A quién le dedicarías un triunfo?

A toda la gente que no me abandonó para esta campaña, que son muy pocos.

==============

Andrés Barrio (1999 – RCN Gran Canaria – Canarias)

Esta es mi primera campaña… media campaña en realidad con el Nacra 17. La empecé con el 49er hasta que formé tripulación con Tara hace año y medio.

¿En qué se caracteriza vuestra campaña?

Es una campaña express, en la que mezclamos la experiencia de Tara con mi sangre nueva o mi juventud, y también mi experiencia y las ganas que tengo de aprender, de mejorar y de adquirir esos conocimientos que a veces lleva tantos años aprender.

¿Cómo superáis la falta de tiempo?

Siendo analíticos con lo que hacemos y eficientes para no perder el tiempo cuando estamos trabajando y cuando descansamos. Intentamos navegar mucho en tierra haciendo bastantes ejercicios de simulación, visualización, análisis y yendo a cosas muy específicas porque si no se nos pueden escapar muchos detalles que realmente marcan la diferencia.

Navegáis en un barco muy exigente a nivel físico, ¿eso se nota?

Sí, yo siempre he sido patrón y con una forma física que no es la que requiere el Nacra. Ahora estamos navegando muchas horas y muchos días seguidos y lo que está marcando los momentos en los que hay que meter un pequeño descanso es mi físico, los brazos y mi lesión de “codo de tenista”.  Se ha corregido bastante gracias al trabajo de los fisios y el equipo médico y seguimos trabajando. Hasta ahora mis lesiones habían sido por accidentes, es la primera vez que se me produce una por el simple hecho de navegar o el desgaste físico. Obviamente estamos trabajando los movimientos que lo producen, cómo coges la escota o cómo trabajas, le presto más atención para no llegar a ese punto de fatiga.

¿El cambio de patrón a tripulante es un cambio de jerarquía o de mirada?

Es un cambio de enfoque. Ahora me tengo que responsabilizar mucho de lo que pasa en el barco y de ser capaz, desde el puesto del tripulante, de llevar el barco para que Tara pueda estar fuera. Tengo que navegar como si fuera un patrón siendo tripulante. Es un poco complicado para mí porque siendo patrón no he tenido que comunicar tanto lo que hacía y ahora sí esa comunicación es mucho más continua.

¿Cuáles son vuestras fortalezas como equipo?

La cohesión. Es algo que sin duda nos está haciendo salir de todos los baches. Y ser eficientes porque el tiempo. Y que tenemos la misma mentalidad de no perdonar ni un error.

¿El mejor y el peor momento de la campaña?

El mejor momento sin duda La haya, haber clasificado al país en la primera oportunidad que tuvimos. Y más saliendo yo de una lesión. Me dio una lancha en el cuello entrenando en Holanda a dos semanas del mundial y me tuve que ir diez días a Santander a tratarme porque no me podía ni mover. Ahí es donde esa fortaleza de cohesión como equipo hace que no se derrumbe todo. Seguimos trabajando a distancia para llegar lo mejor preparados posible y funcionó. El peor fue la lesión que tuvo Tara en el hombro después del mundial entrenado en Marsella. Fue duro para el equipo saber que en 23 meses no íbamos a poder navegar todos juntos. Yo estuve navegando con otras tripulaciones pero sí, sin duda, fue un momento duro

¿Algo que se te hiciera una montaña cuando empezaste y que luego no resultó tan duro?

Te diría que las popas, seguimos teniendo que trabajar mucho en ellas porque a día de hoy es nuestro punto más débil. Ahora entiendo más la dinámica del barco a la hora de navegar de popa, pero al principio me costaba una barbaridad.

¿Un cambio drástico viniendo del 49er?

Sí, todo cambia mucho, por catamarán y por volador, además del puesto. Las tres cosas hacen que mi perspectiva en la forma de navegar cambie.

Monocasco o catamarán, ¿con qué te quedas?

Cuando me preguntan si echo de menos la clase 49er digo que entrenando no, pero a veces, en regata, el barco contra barco, esa cercanía, un poquito. Porque con el Nacra guardamos más las distancias entre barcos por el riesgo que supone navegar muy pegado con la velocidad a la que vamos, y en 49er, con el nivel que hay, está muy compacta la flota. El Nacra es una clase en la que es realmente difícil de conseguir los recursos los tantos técnicos, por ser cara, como humanos , por ser mixto, y eso hace que sea complicado formar una tripulación y disponer de los recursos para poder llevar a cabo una campaña al nivel que requiere.

¿Tus primeras sensaciones al empezar a navegar en vela misxta?

Cuando pienso en los cambios no pienso en que ahora navego con una chica, al final somos compañeros, navegamos en un barco y nos dedicamos a esto por igual.

¿Bajo qué condiciones os sentís más cómodos navegando?

Con mar llana y condiciones de foiling estable se vuelve todo más fácil, da gusto navegar. Es una pasada, la sensación de velocidad pero a la vez de esta habilidad que tienes con esas condiciones, son las que más disfrutas aunque también es verdad que a todo el mundo se le da bien esa condición. Y también las que tuvimos en La Haya, con un poquito de ola.

¿Notáis el cambio de presión al acercarse los Juegos?

Sí pero te diría que es simplemente una presión por parte nuestra por la exigencia que tenemos y por lo mucho que queremos hacer en lo poco que nos queda. Pero la presión está en nosotros, podríamos cogernos una semana de descanso y despejar la mente, pero cuando al llegar a los Juegos desearíamos haber entrenado.

¿Quién es para ti tu gran apoyo?

Mi familia y mi novia, Marina. Ella navegaba antes en FX y me acompaña bastante, sale cuando puede en la lancha y me ayuda a veces a darme cuenta de cosas que puedo mejorar. Y en mi familia siempre he tenido un apoyo. Casi he terminado la carrera y en ningún momento me han hecho dar un paso atrás cuando yo he querido dar un paso adelante a la hora de navegar.

¿Qué significan para ti unos Juegos?

El sueño de un niño que empezó a navegar sin que nadie de su familia o su círculo lo hiciera. No diría que desde el primer momento sabía que quería ir a unos Juegos, porque no sabía lo que eran, pero a la que lo supe lo tuve bastante claro. Vi a los primeros 49er entrenando en Gran Canaria y dije “yo quiero hacer esto”, y cuando supe que se podía ir a unos Juegos, “ahí quiero quiero ir”.  Y no es solo querer, porque mucha gente quiere ir a unos Juegos, también tienes que aprovechar las oportunidades que se presentan, con decisiones que a veces son difíciles de tomar. Por ejemplo la que tomé hace año y medio de dejar atrás cinco años de experiencia en 49er para empezar esta campaña con Tara en el Nacra, algo totalmente diferente, pero sabía que me iba a acercar de manera muy directa al sueño que tenía.

¿Qué sería para vosotros un buen resultado en Paris?

Llegar a los juegos y, antes de empezar, pensar que hemos hecho todo lo posible o todo lo que ha estado en nuestra mano por llegar lo mejor preparados posible sería de entrada una satisfacción personal. Lo que venga después, bienvenido sea. Las regatas y nosotros mismos nos pondrán en nuestro lugar, pero echaremos la vista atrás y tendremos la conciencia tranquila.

¿Dónde te ves de aquí a diez años?

Pues igual empezando la familia, pero seguro que navegando. En qué barco no sé, o si es en vela olímpica o en vela profesional, pero en contacto con el mar seguro. Es algo que se ha convertido en mi vida y sé que nunca va a desaparecer.

¿Qué representa el mar para ti?

Es mi lugar de trabajo y donde he crecido y estoy creciendo como como persona y como deportista. No es donde voy a relajarme o donde me evado de todo porque mi todo es el más y lo que pasa dentro.