Guillem Segú

Cuando empecé a entrenar y competir en windsurf, la orientación de los entrenamientos era hacia la clase olímpica del windsurf, así que se podría decir que me di cuenta de que quería competir a nivel olímpico desde que empecé a navegar.

El objetivo a corto plazo es acceder al equipo preolímpico.

Tengo en mente muchas competiciones emocionantes, pero la más emocionante hasta ahora ha sido un Campeonato de España donde los tres primeros, cada día, salíamos con los mismos puntos al agua, ¡y así terminamos la regata, los tres primeros empatados a puntos!Ahora tengo esta competición en mente, pero seguramente próximamente habrá competiciones aún más emocionantes.

Es todo un placer poder estar en un equipo preolímpico, entrenar con los mejores y poder navegar en partes del mundo en las que nunca hubiera imaginado poder navegar. ¡Es todo un orgullo!

El deporte de alto nivel es muy bonito, pero también muy sacrificado, no solo a nivel físico, sino también a nivel mental. Muchas veces he tenido que sacrificar el poder pasar más tiempo con la familia, la pareja y los amigos para entrenar y/o viajar por competiciones.

Finalicé la universidad hace ya dos años. Actualmente, combino el deporte con la consulta de fisioterapia. Esto me permite ganar experiencia laboral mientras sigo entrenando y compitiendo al máximo nivel.

Siempre he navegado en windsurf. Empecé navegando con la Techno 293 y después navegué durante tres años en RS:X, que por entonces era la clase olímpica.

Un consejo que daría a otros jóvenes sería que sean agradecidos y que disfruten de lo que hacen. Esta experiencia no está hecha para todo el mundo y solo unos pocos llegan a conseguirlo. Por eso, se debe disfrutar el camino, porque está lleno de altibajos y es muy largo.Otro consejo que daría es que sean organizados. Muchos de nosotros estamos estudiando o finalizando estudios, por lo que se requiere una organización especial de las horas de estudio, las horas de entrenamiento y, no olvidemos, las horas de desconexión social.